Cuaderno de cantares:

La alegría

 

 

 

Ahora me pongo a cantar
con alegría y con gozo,
porque han salido a bailar
la cigüeña y el raposo.
  Ahora sí que canto yo
con alegría y contento,
porque ha salido a bailar
el más amigo que tengo.
 

Alegría, alegría,

que dure, dure,

que más vale alegría

que pesadumbre.

 

 

Alegría, alegría,
que yo la vendo,
que me han dicho los mozos
que alegre el pueblo.

  Algún día eran tus ojos
alegrías para mí,
y ahora son alcayatas
donde cuelgo yo el candil.
  Aquí me pongo a cantar
con alegría y sin miedo,
que al que no tiene delito
no le llevan prisionero.

 

 

Aquí me pongo a cantar
con alegría y sin miedo,
Señor Mío Jesucristo,
Dios y Hombre Verdadero.

  Aunque estoy en tierra ajena
siempre estoy con alegría;
porque tengo la esperanza
que he de volver a la mía.
  Ay, qué danza tan alegre,
tan divertida de mozos,
ay de mí, que no está aquí
el que quieren ver mis ojos.

 

 

Camino de Santander,
caminando muy alegre
iba un fraile capuchino
montadito en una liebre.

  Con la licencia de Dios
y de la Virgen María,
nos ponemos a cantar
con muchísima alegría.
  Compañera, canta y baila,
diviértete y anda alegre,
que este mundo es una trampa
y el que llora, tanto pierde.

 

 

Cuando paso por tu puerta
y te veo en la ventana,
se me alegra el corazón
para toda la semana.

  Cuando quise no quisiste,
y ahora que quieres, no quiero,
llevarás la vida triste,
yo bien alegre la llevo.
  Cuando sales al campo,
morena mía,
cantan los pajarillos
con alegría.

 

 

Desde pequeñita
marcheme a un convento
con mucha alegría
y mucho contento.

  Dicen que lo azul es celos,
lo colorado, alegría,
vístete, niña, de verde,
serás esperanza mía.
  Donde hay mozos hay fachenda,
donde hay mozas, alegría,
donde hay viejos sesentones
sermones todos los días.

 

 

El día que yo me case
me alegraré no parezcan
ni el cura ni el sacristán
ni las llaves de la iglesia.

  En el portal de Belén
hay alegría y contento,
que ha nacido el Niño Dios,
entre unas pajas envuelto.
  Este pandero que toco,
retumba con alegría,
porque sabe que quien baila
es la que yo bien quería.

 

 

Gracias a Dios que llegó
este deseado día
en que se nos llena el pueblo
de júbilo y alegría.

  La alegría en un triste
se da tan tarde
como las valentías
en un cobarde.
  La despedida les doy
metida en un ramo verde,
en la vida he dado yo
despedida tan alegre.

 

 

La enhorabuena les damos
a estos recién casados,
y a la gente forastera,
alegres les saludamos.

  La madre del novio llora
con lágrimas de alegría;
al fin ha casado al niño,
bendito sea este día.
  La noche que voy a verte
siempre voy con alegría,
porque llevo la esperanza
de ser tuyo y tú ser mía.

 

 

La noche ya se despierta
y se disfraza de día,
a su encuentro sale el alba,
luego el sol y su alegría.

  La novia qué triste está
y la madrina qué alegre,
y su marido le dice:
dime, paloma, qué tienes.
  La vendimia es en hogaño
mejor de lo que creía,
hay más uva que en antaño
y mucha más alegría.

 

 

Las mocitas de mi pueblo
qué resaladinas son,
delgaditas de cintura
y alegres de corazón.

  Los amores que tú tienes
primero los tuve yo,
me alegro que te diviertas
con lo que a mí me sobró.
  Morena, si vas al baile,
deja en tu casa las penas,
que la danza es alegría
de dulzaina y panderetas.

 

 

No canto porque bien canto
ni porque soy cantadora,
canto por dar alegría
a tu corazón, que llora.

  No hay penitas ni alegrías
que se queden sin cantar,
y por eso hay más cantares
que gotas de agua en la mar.
  Pájaro que estás volando
y en el pico llevas flores,
en las alas alegrías
y en el corazón amores.

 

 

Qué alegres los pajarillos
que cantan en la arboleda
al ver pasar por allí
la flor de la primavera.

  Quien tiene penas, se muere,
quien no las tiene, también;
yo quiero vivir alegre,
mañana me moriré.
  Ramito estrellado,
ramito de flores,
tú eres la alegría
de los corazones.

 

 

Rosa blanca, ponte alegre,
no te quedes desmayada,
que dirán las otras rosas:
rosa blanca no val nada.

  Sal, casada, de la iglesia,
no salgas con cobardía,
que te estamos esperando
con muchísima alegría.
  Salid, mozas, a bailar,
que ya retumba el pandero,
que hoy en día vale más
la alegría que el dinero.

 

 

Salid, mozas, a bailar,
y hacedlo con alegría,
que fiesta como esta noche
no se tiene to’ los días.

  Si quieren saber, señores,
dónde reina la alegría,
en el pueblo que nací
reina de noche y de día.
  Si quieres que te quiera
dame doblones,
que es moneda que alegra
los corazones.

 

 

Si quieres vivir alegre
cásate con un cerero,
y verás cómo te pone
la vela en el candelero.

  Si usté me da una limosna,
le canto con alegría
las penas de San José
y de la Virgen María.
  Tengo cantar y bailar,
y pasar la vida alegre,
que este mundo es una trampa
y el que llora tanto pierde.

 

 

Tengo pena si te veo,
y si no te veo, doble,
no siento más alegría
que cuando mientan tu nombre.

  Tengo penas y alegrías,
tengo dos males a un tiempo,
cuando la pena me mata
la alegría me da aliento.
  Un pajarillo alegre
picó en tu boca
pensando que tus labios
eran dos rosas.

 

 

Una flor entró en la iglesia
nevadita de rocío,
entró triste y salió alegre
al lado de su marido.

  Unas cantan de alegría,
otras cantan por cantar,
yo canto todos los días
y canto por no llorar.
  Vale más la alegría
que yo derrocho,
que los miles de reales
que tienen otros.

 

 

Viva el pueblo de León,
rodeadito de agua fría,
buenos mozos, buenas mozas,
buenas caras de alegría.

  Viva la alegría, viva,
el corazón nunca llore,
vivan los hombres leales,
mueran los que son traidores.
  Viva Tabuyo del Monte,
que es un pueblo muy alegre,
con su pinar tan bonito,
que siempre viste de verde.

 

 

Viva, viva la alegría, viva
y el jaleo de la estudiantina.
Viva, viva la gracia y el aire
y el jaleo de los estudiantes.

  Ya baxan las brañeras,
ya baxa’l rumbu,
ya baxa la alegría
por todu’l mundu.
  Ya se está poniendo el sol,
ya hacen sombra los terrones,
ya se entristecen los amos
y se alegran los peones.

 

 

El río

                                      Los mineros
y el carbón